Por Alfonso Godoy para Real365
La Policía del Destacamento de la localidad, a cargo de la oficial ayudante Ivone Salinero, aprehendió al sospechoso en horas de la madrugada luego de irrumpir empuñando una pistola e intimidando a quienes estaban atendiendo detrás del mostrador y asustando a parroquianos.
Antes de ese episodio habrían ocurrido incidentes previos mientras el sujeto estuvo dentro de las instalaciones sociales bebiendo alcohol con otras personas en una mesa.
Aparentemente mantuvo un intercambio verbal con la cantinera y se habría bajado los pantalones para exhibir su trasero en forma grosera y faltando el respeto de la dama.
Así lo revelaron fuentes cercanas a las actuaciones policiales y judiciales que tuvieron acceso a los relatos espontáneos de varios testigos.
El marido de la mujer ofendida le pidió de buenas maneras que se retirara de las instalaciones del club por no solicitarle disculpas ni mostrar arrepentimiento.
Minutos después arribó conduciendo un automóvil Volkswagen Vento e irrumpió empuñando una pistola calibre 22 que blandió hacia la bufetera, el marido y otra persona más.
Al mismo tiempo que les apuntaba los amenazó: “los voy a matar a los tres”. Las víctimas llamaron a la Policía y el móvil acudió cuando el acusado escapaba conduciendo el auto blanco.
Los integrantes del patrullero iniciaron un seguimiento a distancia y vieron cuando abrió la puerta, se descartó de un elemento, que dejó tirado en la calle y siguió unos metros hasta que se detuvo varios metros más adelante.
Así fue como iniciaron un procedimiento con el relato de las personas intimidadas y el secuestro del arma de fuego que había descartado en en intento de huida.
Los efectivos policiales requirieron la intervención de un testigo para incautar el arma de fuego. Al tomar la pistola Bersa 22 milímetros determinaron que tenía un proyectil montado en la recámara y cinco balas en el cargador.
En la indagatoria el fiscal Mastorchio y el secretario de la Fiscalía 3, Juan Martín Fontana, le imputaron los delitos de amenazas agravadas y portación ilegal de arma de fuego de uso civil.
El automóvil quedó secuestrado en el Destacamento Policial de Acevedo y la pistola con las municiones se incorporaron a las actuaciones judiciales como evidencia.
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