Los integrantes de la filial local de Federación Agraria Argentina: Sebastián Campo (presidente) y Luciano Salaberría (secretario) enviaron una nota al ingeniero Luis Basterra, ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación Argentina.
El contenido de la misiva expresa: “Lejos del anhelo de dirigentes históricos y actuales de nuestra Federación Agraria, cada censo nacional demuestra que año tras año se pierden en el camino miles de productores agropecuarios. Atrás de cada uno de ellos aparece una nueva tapera y se diluyen los sueños de quien soñó ver su chacra florecer.
Estamos convencidos, que la única manera de cambiar la realidad es a través de políticas públicas diferenciadas. Las cuales deben dar un marco de seguridad para que nuestros productores puedan volver a creer y producir.
Bajo las banderas que nos da nuestra entidad y su más de 100 años de historia es que hemos intentado explicar ésta lamentable tendencia sin respuesta alguna”. “El día 23 de diciembre de 2019 tuvimos la primera reunión de trabajo con el recientemente designado Ministro Basterra.
En un marco de un diálogo franco y transparente nuestra Filial, y muchas más, tuvimos la oportunidad de explicar la difícil situación del productor agropecuario. Entre otras cosas se habló de: Ley de semillas, Ley de Arrendamiento, Acceso a la tierra y obviamente de derechos de exportación.
En este último tema se fundamentó claramente porque NO podemos tener todos los mismos porcentajes de retención”. “En los meses siguientes seguimos aportando propuestas que mejoren un esquema de “segmentación”. Y finalmente para el mes de Marzo de 2020 teníamos en nuestras manos un programa definitivo. Este programa, claramente perfectible, marcaba un camino.
El camino hacia la tan esperada diferenciación de productores”. “Ya transcurrieron once meses de aquella lejana reunión de diciembre y 7 meses de tener el proyecto presentado como ley. Pero, como reza la popular canción, “veo un museo de grandes novedades”.
Una vez más, la clase política nos falla, nos miente en la cara. Nos suelta la mano en un contexto de sequía, el cual afectó duramente los cultivos de inviernos y las reservas forrajeros de nuestros pequeños ganaderos; olvidando lo importante del sector en medio de una pandemia que sacudirá nuestro planeta.
Con la autoridad que nos da, haber tomado una posición dialoguista, intentando olvidar fantasmas de aquel reñido 2008, aportando propuestas con la clara idea de hacer del sector agrario argentino, una potencia formada por pequeños y medianos productores que llenen de alimentos las mesas de los argentinos y del mundo, es que hoy decimos: no nos mientan más.
Y preguntamos: ¿Cuál es el modelo agrario? ¿Tendremos los pequeños productores un tratamiento diferente? ¿Concentración o colonización? ¿Arraigo rural o aglutinamiento urbano? ¿Concentración de la tierra y la producción o distribución?”
“Hace décadas este país necesita un debate profundo y sincero sobre nuestro sector, que para lo único que se lo mira, es para agregarle un nuevo impuesto. Acá estamos los federados dispuestos a aportar experiencias y conocimiento, pero nada se puede hacer en un marco de desconfianza. Y la única manera de sentir confianza es con hechos. Nosotros ya demostramos nuestra voluntad. La respuesta la tienen ustedes”.
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