En una acalorada jornada y bajo estrictas medidas de seguridad, este martes el Concejo Deliberante de Pergamino aprobó la esperada Reforma Municipal. La sesión, la décimo séptima ordinaria del año, se llevó a cabo a puertas cerradas debido a los incidentes registrados la semana anterior. A pesar de la falta de público, un grupo de la Asociación de Trabajadores del Estado se hizo presente en la entrada de la Municipalidad para expresar su descontento con la decisión.
El proyecto fue promovido por el concejal Ignacio Maiztegui, quien solicitó una moción para retomar el tratamiento que había quedado inconcluso en la última sesión. La iniciativa fue finalmente avalada por mayoría, con 11 votos a favor y abstenciones de los concejales de La Libertad Avanza, Jorge Dib y Gabriel Figueroa.
Debate sobre la tercerización de servicios
Uno de los puntos más polémicos de la reforma fue la tercerización de servicios municipales. La concejal Ivana Tribouley, que había dado quórum en la sesión anterior, defendió su posición a favor del proyecto, destacando su alineación con las políticas nacionales de eficiencia en el gasto público. Sin embargo, esta postura fue duramente cuestionada por otros ediles, incluyendo Leticia Conti, Nicolás Cabrera, y Silvia Viera, quienes se mostraron en contra de la medida, alegando que podría afectar negativamente a los trabajadores municipales y a la calidad de los servicios.
Momentos de tensión y debate en el recinto
Durante la sesión, no faltaron momentos de tensión. Un fuerte cruce de palabras tuvo lugar entre los concejales Ramiro Llan de Rosos e Ignacio Maiztegui, a raíz de un proyecto relacionado con la seguridad que había sido presentado por la Cámara de Comercio local. Llan de Rosos realizó un cuestionable paralelismo criticando la presencia policial en el Concejo tras los hechos violentos recientes, lo que provocó la reacción inmediata de Maiztegui, quien consideró desafortunado el comentario por minimizar la violencia sufrida.
Por su parte, el concejal Álvaro Reynoso solicitó un cuarto intermedio para dialogar con los manifestantes afuera del edificio sobre la tercerización de servicios, moción que fue rechazada. En señal de protesta, el bloque de Unión por la Patria se retiró brevemente del recinto, regresando tras 15 minutos.
Acuerdos y consensos alcanzados
A pesar de la marcada polarización, la sesión también dejó algunos puntos de acuerdo. Los bloques de Juntos por el Cambio y La Libertad Avanza unificaron esfuerzos para solicitar al Ministerio de Seguridad provincial el envío de más efectivos policiales a Pergamino, debido a la carencia de personal en la ciudad. “La falta de policías es una realidad que no podemos ignorar”, destacó el concejal Dib, con el apoyo de su colega Giuliana Rueda.
Rechazo a la violencia política
Otro momento álgido fue el debate en torno a una resolución que buscaba repudiar los hechos de violencia ocurridos en el Concejo Deliberante el 29 de octubre y el 5 de noviembre. El proyecto, impulsado por las concejales Caldentey, Paladino y Rueda, finalmente no logró el consenso necesario para su tratamiento sobre tablas, evidenciando la dificultad para llegar a un acuerdo en torno a la violencia política y el clima de crispación que se vive en el ámbito local.
Obras y mejoras aprobadas para la ciudad
No todo fue conflicto en la sesión. Se aprobaron varios proyectos pensados para mejorar la calidad de vida en Pergamino, como la adquisición de nuevos contenedores, obras viales en la zona de Virgen de Lourdes y Torrent, la construcción de rampas de accesibilidad en Boulevard Vélez Sarsfield y la extensión del servicio de gas natural en el Barrio 104 Viviendas.
La sesión cerró con un ambiente de tensión aún latente, dejando entrever que los debates en el Concejo Deliberante continuarán siendo el reflejo de la compleja realidad política y social de la ciudad.
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