“Estamos realizando una serie de obras que dividiría en tres grandes llaves. Una que tiene que ver con un problema histórico en la zona de Tribunales, otra que tiene que ver con un problema histórico en la zona de lo que sería el barrio de Desiderio de la Fuente y Barrio Ferroviario, y una tercera que es el sistema general de agua en Pergamino”.
Respecto a las dos primeras situaciones que se describen, hay una obra en marcha que es la concreción de una cisterna, que va a operar sobre una zona anillada y delimitada que está entre calles Hipólito Yrigoyen, Ugarte, Rocha y Colombia. La idea fue anillar ese sector y a partir de aislarlo del sistema general con bombas presurizadoras poder mantener un nivel de presión constante, en una zona que es muy alta.
“Ustedes saben que el agua se distribuye por una situación de diferencia de presiones y, a esa zona alta, la idea es anillarla y proveer el agua desde esa cisterna”, explicó.
Con respecto a la zona de Tribunales, el funcionario comentó que “la situación quizá sea más compleja, en términos de no poder anillar un sector donde quedaría incluida también la cisterna que es el depósito general de agua de la ciudad”.
Nuevas obras
Illia detalló que durante este tiempo se avanzó en una obra “que tiene que ver con llaves en caños de 400, que fueron colocadas alrededor de 1930 y luego se taparon. Se está trabajando para poder ponerlas en funcionamiento porque la presión de la ciudad se regula a través de llaves donde nosotros podemos ir dando mayor o menor presión en alguna zona. Esas llaves sabíamos que estaban caídas desde la época en que el servicio estaba en manos de Obras Sanitarias de la Nación y nunca se había podido acceder a ellas para repararlas. Lo hicimos, se sacaron las llaves, la reparación significó todo un trabajo de herrería y de tornería”.
Sobre este tema se aclaró que no sólo se va a reparar la llave para poder trabajar la regulación en ese sector, que es uno de los críticos, sino que además se va a dejar una celda de acceso para que, a futuro, las administraciones que vengan puedan operar sobre el servicio teniendo acceso a la llave.
“Esto habla también de obras de mantenimiento que no se han venido haciendo en el transcurso de muchísimos años. El cambio que nosotros podemos manifestar tiene que ver con algunos temas puntuales”.
El secretario explicó que se está trabajando en los elementos para regular (o sea, las llaves en funcionamiento) y por otro lado, tener provisión de agua suficiente como para mantener la reserva que existe en Francia y Mitre de la cisterna en niveles aceptables como para abastecer la red.
“Ayer pasamos un día crítico. La época más difícil para nosotros siempre fue entre principios de diciembre y principios de enero”, aseguró.
Nuevas piletas
Desde el Municipio informaron que se han incorporado gran cantidad de piletas a la ciudad. “Tenemos que ver qué pasa con las temporadas de los clubes. También va a haber modificaciones que son difíciles de cuantificar y no sabemos cuál es el impacto que va a tener en el sistema”, dijo Illia al mismo tiempo que comentó sobre las obras en marcha. “Además de la cisterna de Desiderio y de Colón y Alsina, estamos con tres pozos que se van a poder conectar a la red en las próximas semanas, y vamos a tener un tercero que tardaremos unos diez días en poder engancharlo a la red”.
Es una obra que está en marcha y se estima que el mes próximo va a estar concluida.
“Estamos trabajando en un nuevo tanque en la zona de Villa Alicia. Ahí se construyó una nueva red que asiste varias manzanas que se incorporaron al sistema y ayer subimos la torre de La Guarida que va a tener un depósito de agua para asistir una nueva zona”, explicó.
El funcionario dijo que “se debe empezar a trabajar sobre cuánta agua consumimos los pergaminenses y otro tema que vimos desde el primer día de gestión es la calidad: hemos resignado pozos importantes y presión en función de la mejor calidad de agua. Hemos sacado pozos de circulación priorizando la salud por sobre la presión del agua”, aclaró.
Bombas domiciliarias
Illia hizo hincapié en el tema de las bombas. “Muchos vecinos están conectando bombas chupadoras a la red. Esto no está permitido y lo vamos a controlar con multas. Estamos viendo la forma técnica de colocar reductores en el ingreso de agua de esos domicilios porque no nos permite a nosotros regular en el sistema. Con estas bombas cada usuario le puede sacar a la red y de esa manera desaparece el área de obras sanitarias como ente regulador de la provisión de agua y altera también en esos lugares el sistema de presión en los domicilios vecinos”.
El Municipio va a lanzar una licitación que se abre el 29 de diciembre respecto a la compra de 4000 medidores. “Esos los vamos a poner a los grandes consumidores. Se está sobrevolando la ciudad con drones para establecer dónde están las piletas instaladas ya que es un agua que nosotros tenemos que controlar. La idea es que esos medidores empiecen a trabajar sobre estos grandes consumidores y esto es una primera etapa. La idea es que los próximos 4 o 5 años tengamos todo el servicio medido. Ayer estuvimos reunidos con el Intendente trabajando sobre la problemática del agua y una de las cosas que se decidieron en esa reunión fue avanzar en los controles sobre el exceso de consumo. Todo lo que se estipula sobre derroche se va a inspeccionar y se va a multar, la multa por derroche es de 7000 pesos”.
Illia sostuvo que hay que llegar a un punto de equilibrio entre la generación de agua y el consumo lógico de la comunidad. “Ese punto de equilibrio lo van a dar únicamente los medidores. No vemos otra solución. Hemos apelado en otras oportunidades a campañas y pedidos. Tenemos un consumo promedio que da la Organización Mundial de la salud de 250 litros por persona y nosotros, en Pergamino, estamos por encima del doble de consumo por habitante. Nos parece lógico que la gente quiera tener una pileta en su casa pero tenemos que apelar al esfuerzo de cada uno de los vecinos respecto a la conservación del agua”, solicitó.
Comentarios