Por Alfonso Godoy
Carina Geoghegan participó de la causa judicial por los abusos sexuales perpetrados por la ex pareja contra su hija cuando tenía 10 años como particular damnificado con un abogado para que el caso llegue a una condena.
El jueves al mediodía el Tribunal Oral en lo Criminal 1 condenó a seis años de prisión y ordenó la detención de su ex pareja por los ataques sexuales a la niña dentro de la casa donde convivían.
En el desarrollo de la sentencia se conocieron los detalles de la violencia familiar que padeció la mujer dentro de esa casa donde este sujeto aprovechaba las mañanas en que la mujer se iba a trabajar para abordar a la nena mientras dormía.
El juez Burrone consideró sólidos los relatos de los tíos y los padres sobre los padecimientos de la menor en contra posición a los intentos del abogado defensor de querer instalar una versión de venganza de la madre por las agresiones que sufría de su marido. En este sentido, la mamá expresó: “La defensa de él era como era todo inventado por mi hija. Sus sentimientos, dolor y llantos se tratarían de una comedia montada. Decían como que yo manipulé a mi hija a que cuente el sufrimiento. Los sentimientos no se pueden fingir. Mi hija no puede fingir. Mi hija si en este momento sale a la calle: sale acompañada de alguien. Mi hija ya no es como cualquier nena de 14 años. Ella anda para todos lados conmigo, o con mis hermanos o con su papá o el abuelo. Si ella camina por la calle se va fijando si se cruza con este sujeto o no. Ese trauma llevó todo un proceso de tratamiento con psicológos. Yo la estoy acompañando en todo el proceso para que logre estar bien”.
La madre contó como fue el momento en el que le contó la sentencia judicial. “Cuando llegué a mi casa le conté que había sido condenado. Ella lloró mucho y me dijo ´soy libre´. Y es verdad. Mi hija es libre. Gracias a Dios es libre”, expresó la madre.
A partir de lo que se ventiló en el juicio oral surgieron otros delitos que desde la Fiscalía requirieron que se inicien investigaciones judiciales por la posible imputación de nuevos cargos penales contra este sujeto. “En el juicio el fiscal Mastorchio pidió que se investigue porque los abusos eran violentos, los golpes a mi eran violentos y todo el trato que él daba eran violentos. No puedo decir que estoy feliz porque el dolor a mi hija no se lo va a sacar nadie; pero si estamos tranquilas. Estamos en paz, totalmente”.
Las expectativas de la madre es la unificación de las dos condenas por abusos sexuales contra este sujeto una vez que ambas sentencias queden firmes y que el agresor sexual vaya detenido a un penal.
Carina enfatizó que la hija no ha sido la única menor abusada por este sujeto; ya que ya ha sido condenado por manosear a una alumna; tuvo un hijo con una estudiante de su curso y habría otras víctimas. “Yo espero que vaya detenido a un penal. Es lo mismo que esperan las mamás de esas alumnas que él tocó. Hay otros casos de otras estudiantes que no lo han denunciado, pero si están las actas en las escuelas donde han ocurrido estas manifestaciones o acciones de intentar sobrepasarse con menores”, concluyó.
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