Previo a la entrega de los diplomas se proyectó un video institucional en el que se relató la historia de una joven estudiante de la localidad de Pinzón, Irina Baldomir, que obtuvo su título de contadora y minutos más tarde, en representación de los graduados la reflexión fue de Renata Morro, egresada de la carrera de Enfermería Universitaria, quien destacó la importancia del paso por la Universidad. Ambos testimonios rescataron el valor de la universidad pública “cerca de casa” y definieron su paso por la UNNOBA como “una experiencia transformadora”.
“Este es un día memorable para nosotros por lo que representa el haber concretado el compromiso que asumimos cuando decidimos estudiar en la Universidad”, expresó Renata Morro.
“En lo personal vivo en Rancagua y he viajado a diario desde mi pueblo para poder estudiar. Elegí Enfermería por ser una carrera de perfil humanístico y opté por la UNNOBA, no solo porque era la primera oferta universitaria en la ciudad, sino por la calidad de la formación que me proponía”, refirió.
La estudiante hizo referencia al cumplimiento de los 104 años de la Reforma Universitaria de 1918 y destacó alguno de sus postulados centrales, como el valor de la participación estudiantil en los procesos de crecimiento de las instituciones y la existencia de la UNNOBA en la región, porque “el paso por la Universidad y por la educación transforman la vida”.
La palabra del rector
En su discurso, el rector de la UNNOBA, Guillermo Tamarit, hizo una fuerte defensa de la educación pública por el papel preponderante que juega en la construcción de la sociedad.
“Nuestra consigna siempre ha sido la inclusión y la calidad. Inclusión porque para los sectores con menos recursos la educación es casi su única alternativa de cambiar ese destino. Y la calidad, porque si ese proceso no es virtuoso no les damos la oportunidad de que peleen por mejores salarios y mejores empleos. En eso estamos en la UNNOBA, sencillamente en no dejar a nadie atrás”, expresó Tamarit.
En relación a un nuevo aniversario de la Reforma Universitaria, el rector expresó: “Ese modelo universitario ha posibilitado a la sociedad argentina construir una herramienta de movilidad social ascendente, es un bastión de la educación pública que defendemos, porque aún en los momentos más difíciles sigue dándonos respuestas y posibilidades de avanzar”.
Tamarit consideró que es un momento en que a la sociedad le cuesta avizorar con claridad el futuro, “la universidad pública tiene que apostar a más democracia, profundizar la conversación pública y la construcción de consensos”.
También se refirió a los desafíos que planteó la pandemia a la educación pública ya que profundizó las desigualdades. “El acceso al conocimiento empieza a tener ganadores y perdedores y eso va segmentando de la peor manera a la sociedad”, señaló. Se refirió al número importante de estudiantes que quedaron fuera del sistema educativo durante la pandemia y remarcó la urgencia “de ir a buscarlos e incorporarlos a las aulas”.
En otro tramo de su mensaje reflexionó sobre el sistema de educación superior y planteó que “el número de estudiantes que llegan a las aulas es insuficiente todavía para pensar en una Argentina desarrollada”.
Asimismo, trazó un balance del camino recorrido por la UNNOBA en sus veinte años de vida institucional y avanzó sobre algunos desafíos: “De cara al futuro las áreas en las que la Universidad va a plantearse discusiones están relacionadas con la salud, tecnología de la información y la inteligencia artificial, la logística, la gestión de los recursos, las estadísticas, en el marco de programas y políticas de género, sostenibilidad medioambiental y de compromiso social”.
Por último, agradeció a los graduados y sus familias y finalizó su discurso con un párrafo del Manifiesto Liminar al expresar: “Si no existe una vinculación espiritual entre el que enseña y el que aprende, toda enseñanza es hostil y, por consiguiente, infecunda. Toda la educación es una larga obra de amor a los que aprenden”.
Entrega de diplomas
Uno de los momentos más emotivos de la ceremonia se vivió cuando la mamá de Irina Baldomir, la joven que relato su historia familiar y los esfuerzos que hizo por llegar a la Universidad en el vídeo institucional que se proyectó en el acto, fue convocada por las autoridades para entregarle el diploma a su hija. Luego de ello, se continuó con la entrega de los títulos a graduados de las distintas carreras.
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