Pergamino, 13 de diciembre del 2024

Condenaron a cuatro años de prisión por robo a uno de los homicidas de Ivana Crespi

El juez Guillermo Burrone condenó a cuatro años de prisión de efectivo cumplimiento a los hampones Edgar Alejandro “Mono” Aldana (36) y Claudio Sebastián “Toti” González (36) por el robo de dinero, dispositivos electrónicos y carne de un local de barrio Acevedo.

Viernes 17 de mayo de 2024
Por redacción Real 365

Edgar Alejandro “Mono” Aldana (36) era menor cuando participó del letal ataque a la joven en 2005. Fue condenado por ese crimen y esta semana el juez Guillermo Burrone volvió a establecer una pena de prisión por un robo.

La Justicia de Menores condenó a los dos autores del homicidio de Ivana Crespi, ocurrido el lunes 11 de julio de 2005 en un letal ataque en el barrio San José.

En esa fecha a Edgar Alejandro “Mono” Aldana le faltaban poco más de tres meses para alcanzar la mayoría de edad.

Por ese motivo fue procesado por la Justicia Juvenil y llegó a juicio oral en la Cámara de Apelaciones en lo Penal de Pergamino.

Aldana terminó condenado por el crimen de la joven que tuvo mucha repercusión en nuestra comunidad.

Es un hampón que estuvo preso por la Justicia Juvenil como uno de los involucrados en el asesinato de Ivana Crespi, pero luego reincidió en el delito al quedar procesado en varias causas de robos y otros sucesos contra la propiedad.

Esta semana el Tribunal Oral en lo Criminal 1 dio a conocer el veredicto condenatorio en el juicio oral a dos ladrones involucrados en el robo de un comercio cercano a las torres de la UOM, en el barrio Acevedo en junio del año pasado.

El juez Guillermo Burrone condenó a cuatro años de prisión a Edgar Alejandro “Mono” Aldana (36) y Claudio Sebastián “Toti” González (36) por considerarlos coautores penalmente responsables de los delitos de “robo agravado por ser cometido en poblado y en banda”.

A Aldana lo consideraron reincidente, primera vez, por una condena reciente en una causa penal.

El debate oral tenía como principal discusión si correspondía condenar a los dos acusados por el agravante de “banda”; de acuerdo a la modalidad delictiva con el que cometieron el episodio.

El fiscal Francisco Furnari llevó a juicio a los dos involucrados por considerar las pruebas que los mantuvieron procesados hasta lograr la condena judicial.

El abogado defensor de ambos convictos no discutió la participación de los ladrones en el robo. La estrategia de la defensa estaba centrada en quitar el agravante de “banda” en la calificación de la condena.

Al juicio llegaron dos hampones, pero del robo participaron tres personas; según lo acreditó el fiscal Furnari.

La defensa intentó derribar la teoría de la participación de tres sujetos; ya que el tercer cómplice no quedó identificado en la instrucción judicial.

En la madrugada del viernes 16 de junio del año pasado ocurrió el robo de una importante suma de dinero; productos y dispositivos electrónicos de la carnicería de Siria y Ricardo John.

A las 2:50 horas quitaron la malla metálica que protegía la vidriera. Luego cortaron un barrote de la reja, rompieron el vidrio del ventanal sobre calle Ricardo John e ingresaron dos de los ladrones al local.

Un tercer sujeto quedó en el exterior haciendo de “campana” para tener una visión panorámica de la circulación vehicular de ambas arterias del barrio Acevedo y alertar en caso de ocurrir algún riesgo para los delincuentes.

Los vecinos que escucharon ruidos se asomaron vieron a los tres hampones. Las personas llamaron a la Policía. Mientras tanto, los ladrones en pocos segundos se apoderaron de cortes de carne y productos embutidos por un valor aproximado de medio millón de pesos.

De acuerdo al detalle de las actuaciones judiciales: sustrajeron -además- dos cuchillas; perfumes; un caloventor; un parlante; dos ganchos con chorizos y morcillas y veinte mil pesos en efectivo.

Las instalaciones comerciales contaban con cámaras de seguridad que registraron el robo y el sistema de alarma monitoreada reportó el ingreso de desconocidos al comerciante; a través del llamado de un operador.

El dueño del comercio se dirigió rápidamente al local para constatar el robo. En minutos obtuvo los videos registrados por las cámaras de seguridad para determinar la participación de dos ladrones en el robo.

Los vecinos se acercaron en forma espontánea a contar lo que vieron desde sus casas para señalar la partición de tres sujetos en el robo, con distintos roles en la maniobra delictiva.

Una de las personas vio a los ladrones desde el interior de la casa, ubicada frente al comercio y el otro testigo advirtió lo ocurrido mientras paseaba el perro en las cercanías.

Los integrantes de la brigada motorizada GDM acudieron al lugar y se involucraron en la investigación policial para la Fiscalía 2. La pesquisa logró el dato de una persona; quien señaló a los dos convictos.

La versión de este informante daba cuenta que en los domicilios de los sospechosos podían encontrar cortes de carne y los productos embutidos sustraídos del negocio.

Así fue como el fiscal Furnari ordenó allanamientos de urgencias, donde secuestraron cortes de carne, chorizos, morcillas y salchichas parrilleras en el domicilio de Carranza y carne de cerdo, morcillas y chorizos en el domicilio de Aldana. Además, incautaron un buzo de color gris y rojo que vestía el coimputado González, de similares características al observado por un testigo.

Los registros audiovisuales de las cámaras de seguridad dieron cuenta de cómo Aldana llamaba a González por su sobrenombre: “Vamos Toti”, se escuchó en la voz de uno de los imputados.

Al momento de establecer el monto de pena el juez Burrone consideró como agravante los antecedentes penales de ambos condenados.

Contundente acusación

El fiscal Francisco Furnari al formular su alegato fue muy contundente en su acusación solicitando una dura condena para los imputados, requiriendo se le imponga la pena de 7 años de prisión de cumplimiento efectivo para cada uno de ellos. Finalmente desde el Tribunal Oral en lo Criminal establecieron el monto de pena en cuatro años que la deben cumplir por el cúmulo de antecedentes y al ser considerados reincidentes.

Crimen de Ivana Crespi

En julio de 2005 en el barrio San José asesinaron a Ivana Crespi en un intento de robo de la moto en la que iba como acompañante de su novio.

El crimen de Ivana Crespi se resolvió en juicio oral cinco años después del episodio que le costó la vida a la joven.

Los dos sujetos involucrados fueron juzgados como menores ya que al momento del asesinato tenían menos de 18 años de edad.

La sentencia judicial de la Cámara de Apelaciones en lo Penal, integrada por los jueces Mónica Guridi, Martín Morales y Guillermo Burrone condenó a Edgar Alejandro “Mono” Aldana y a Martín Andrés Guibelalde a ocho años de prisión por la calificación de homicidio en ocasión de robo.

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