El viernes 4 de agosto en Colón la Fiscalía y la Policía de Drogas Ilícitas allanaron un domicilio donde secuestraron estupefacientes.
El procedimiento es consecuencia de las evidencias logradas en una investigación previa que indicaba que la familia que residía ahí podía estar relacionada a la venta al menudeo de estupefacientes.
Los investigadores policiales presentaron en la unidad especializada de la Fiscalía realizaron el allanamiento secuestraron dosis de cocaína y marihuana.
Además, incautaron elementos para fraccionar cocaína; la droga que comercializarían en esa morada.
Durante ese operativo aprehendió al morador y luego el juez ordenó la detención de los integrantes un matrimonio (marido y mujer), y sus dos hijas de entre 20 y 30 años, que a la vez tenían hijos de menor edad.
La Fiscalía logró acreditar que una de esas hijas, mantenía contacto con su pareja que estaba en el penal.
El convicto desde su celda de la prisión, donde estaba cumpliendo una condena por venta de estupefacientes, desde mayo de este mismo año. En ese momento fue encarcelado a raíz de un procedimiento que llevó a cabo la Policía Federal.
El sujeto está preso por venta de droga en el penal de Junín, y desde ahí coordinaba la comercialización al menudeo de sustancias ilícitas; según lograron acreditar desde la Fiscalía.
Lograron evidencias sobre los contactos frecuentes con la pareja y desde allí él la asesoraba, le daba indicaciones, tomaban decisiones en conjunta, administraba el flujo de compradores le coordinaba el flujo de provisión de estupefacientes y controlaba las ganacias de dinero.
La mujer que estaba en libertad y continuó con el comercio con el ejercicio del comercio que antes hacía su marido, ella lo siguió haciendo. La única diferencia es que la mujer lo hacía con la ayuda de él desde el penal.
El preso, a través de la comunicación que podía mantener con ella estaba en todo. Incluso hablaba con compradores y se los enviaba, fijaba el precio y se los mandaba a ella para que le dé la droga. A la vez los investigadores judiciales y policiales lograron detectar que un familiar de estas personas cuatro detenidas -quien reside ahora en Pergamino- era una proveedora habitual de estupefacientes para que puedan vender en Colón.
Por ese motivo desde la Fiscalía requirieron el allanamiento esa morada en el barrio ex Quinta Mastrángelo el martes.
La familiar pergaminense del clan colonense cayó detenida acusada de proveerle la droga que luego comercializaban. En ese operativo policial secuestraron un revólver calibre .22.
Al mismo tiempo una comisión policial especial allanó la celda del recluso en la unidad penal de Junín, donde le secuestraron el teléfono celular.
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