El juez César Solazzi confirmó la detención de un sujeto acusado de protagonizar un robo a mano armada; de acuerdo a las pruebas acumuladas por el fiscal Francisco Furnari en una instrucción judicial de la Fiscalía Nº 2.
El jueves 20 de junio en Estrada y Magallanes dos delincuentes armados abordaron al empleado de una avícola para despojarlo de 500 mil pesos, teléfonos celulares y otras pertenencias. Se trata de un delincuente con antecedentes penales condenatorios.
En esa esquina del barrio Centenario funciona un comercio donde el trabajador se dispuso a bajar mercadería de la parte trasera de la camioneta de reparto de “Avícola Fe”. Mientras se encontraba en la caja del vehículo preparando el pedido es que irrumpieron dos delincuentes.
El convicto detenido, por requerimiento del fiscal Furnari, fue el encargado de abordarlo. Tal como surge de las actuaciones, también lo empujó al piso. Una vez que cayó derribado el empleado de la avícola, el delincuente lo intimidó apuntándole con un revólver; de acuerdo a lo manifestado por el joven asaltado.
De esa manera, lo despojó de una mochila que contenía medio millón de pesos en efectivo; entre otras pertenencias que había en el habitáculo de la camioneta como teléfonos celulares y la llave de arranque del vehículo laboral. La Fiscalía Nº 2 se valió del testimonio de la víctima y las imágenes de cámaras de seguridad para determinar que tras el atraco los dos ladrones escaparon corriendo por Magallanes hacia avenida Illia. El empleado de la distribuidora avícola los vio ascender a un automóvil tipo Fiat Uno oscuro.
La labor de la instrucción judicial logró individualizar el vehículo a través de las filmaciones de cámaras de seguridad urbanas y particulares. El trabajador brindó su testimonio y reconoció al principal asaltante en la foto de su red social Facebook. La propia pareja del acusado complicó la situación procesal del hampón al declarar que el auto Fiat Uno es de ella y que el sujeto se lo llevó de la casa en la mañana del episodio ocurrido en barrio Centenario.
Actualmente las cámaras de seguridad urbanas logran aportes valiosos a las investigaciones judiciales ya que se pueden reconstruir los momentos anteriores y posteriores a los episodios delictivos. Así fue en este caso ya que los instructores judiciales de la Fiscalía 2 y los investigadores policiales del gabinete de investigaciones de la Comisaría Segunda y de la DDI acreditaron en la causa penal que a la camioneta de reparto la siguió el Fiat Uno negro en todo el recorrido previo hasta que lo abordaron frente al comercio.
Desde la Fiscalía Nº 2 al momento de requerir la detención al Juzgado de Garantías, sostuvieron la importancia de mantenerlo privado de la libertad al ladrón por el riesgo a que entorpezca la investigación estando en la calle y por la peligrosidad al tener antecedentes penales condenatorios.
En noviembre de 2020 el Tribunal Oral en lo Criminal lo condenó a tres años y dos meses de prisión por considerarlo penalmente responsable de los delitos de robo calificado por escalamiento, usurpación y amenazas; en varias causas que se acumularon para llevarlo a juicio. El automóvil Fiat Uno negro quedó secuestrado a partir de un allanamiento realizado en la casa de un convicto con arresto domiciliario en la zona sur de la ciudad.
Procedimiento policial
En 9 de Julio al 2.300, del barrio Centenario, realizaron el operativo policial los uniformados de la Comisaría Segunda y de la Policía de Investigaciones (DDI) para detener, con orden del Juzgado de Garantías Nº 1, al sospechoso del robo. Ahora enfrenta un grave proceso penal.
Por Alfonso Godoy
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