La Policía de Investigaciones allanó la morada del empleado de un taller mecánico acusado por la Fiscalía 1 de haber facilitado el vehículo utilitario de un cliente para cometer un millonario robo.
El martes 16 de enero a la madrugada ladrones irrumpieron en la vivienda de una mujer de 51 años para reducirla junto al hijo y despojarlos de una millonaria suma de dinero, armas de fuego y alhajas.
La Fiscalía 1 y la Policía de Investigaciones (DDI) inicialmente detuvieron a uno de los sospechosos y luego dieron con la identificación del vehículo utilizado por los maleantes.
Las imágenes de cámaras de seguridad particulares y urbanas permitieron individualizar la denominación alfa numérica del furgón utilizado para llegar y luego huir de la escena del crimen.
Así fue como allanaron la vivienda del propietario para secuestrar el vehículo e incautar elementos que puedan ser de interés para el caso; como dinero en efectivo y el teléfono celular.
El dueño del vehículo Renault Kangoo fue trasladado a sede policial y ante los uniformados aseguró su inocencia en el caso.
Para sostener sus dichos de ser ajeno a lo ocurrido: brindó la coartada que lo sacaba de la escena del crimen a él; pero no al auto de su propiedad.
De acuerdo a lo que acreditó en su relato: el lunes llevó el furgón a un taller del barrio Vicente López para que le realizaran una reparación electromecánica.
Luego, se fue unos días de pesca con amigos; como parte de una actividad recreativa en el marco de sus vacaciones laborales.
Familiares, amigos y personas que compartieron esos días fueron testigos en el caso para que finalmente la Fiscalía desistiera de mantenerlo aprehendido.
Desde el Ministerio Público Fiscal peritaron el teléfono y se lo devolvieron; al igual que el vehículo y el dinero que le habían secuestrado en la casa de los padres.
Los instructores de la UFIyJ 1 fueron al taller mecánico y quedó aprehendido un empleado en un procedimiento realizado en un domicilio de barrio 12 de Octubre.
La instrucción judicial considera que ese sujeto habría facilitado la utilización del utilitario Renault Kangoo para cometer el ilícito.
Se trataría de un empleado infiel; quien se apoderó del rodado mientras se encontraba en reparación y lo entregó a los autores del robo.
Es necesario determinar si también habría participado en el atraco como el conductor de la unidad filmada en las inmediaciones de la casa asaltada.
El propietario del vehículo tuvo que recorrer los pasillos de la Fiscalía para acreditar su inocencia y estuvo a punto de perder el trabajo por lo ocurrido.
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