Así lo adelantó en forma preliminar el presidente del Tribunal Oral en lo Criminal, Guillermo Burrone.
El juicio demandaría cinco jornadas de debate oral, según la estimación de la acusación y la defensa en base a la evidencia necesaria de producir en las audiencias.
El jueves en el Tribunal Oral en lo Criminal el imputado participó de una audiencia junto a su abogado defensor, Néstor Líber Álvarez.
El juez Guillermo Burrone presidió el cónclave del que también participaron los fiscales de juicio Pablo Santamarina y Francisco Furnari; y los abogados querellantes, Aquilino Giacomelli (familia Plencovich) y Fabián Vizcaíno González (familiares de Ferrari).
A partir de las acciones que coordinaron las partes: quedaron establecidas las pruebas y testimonios necesarios para esclarecer el episodio para la defensa; la acusación fiscal y los abogados de los familiares de las víctimas.
El Tribunal Oral en lo Criminal debe determinar la cantidad de jornadas de debate oral en base al cúmulo de evidencia que se expondrá en el debate a través de los testigos que intervinieron en las primeras actuaciones policiales, los peritos y la exposición de las pericias telefónicas.
También deben tener en cuenta que la primera jornada sirve para seleccionar a los ciudadanos que integrarán el jurado popular. Tienen que ser doce personas titulares y seis suplentes. La docena de jurados que presenciarán el debate serán mayores de 18 años y habrá la misma cantidad de hombres y de mujeres.
En estos días el juez Burrone va a firmar la Resolución sobre la cantidad de pruebas que se producirá en el juicio en base a las peticiones de las partes y los testigos que brindarán testimonios en el estrado.
La secretaría de la Cámara Penal ha asignado las fechas de debate en base a la cantidad de jornadas que requiera el juicio y la disponibilidad en el cronograma del Departamento Judicial Pergamino.
El doble crimen
El lunes 14 de marzo de 2022 a las tres de la tarde Agustín Plencovich y Luis Ferrari concurrieron –a bordo de la pick up Renault Alaskan- a la finca rural de Gabriel “El Sátiro” Sánchez (51).
En el casco de ese campo, ubicado en la zona rural de El Socorro; a la altura del acceso a General Gelly, los recibió el propietario.
“El Sátiro”, como lo conocían en Gelly y El Socorro, empuñaba una escopeta calibre 14 milímetros con la que disparó en dos oportunidades contra Plencovich y Ferrari.
Uno de los proyectiles impactó en el pecho del joven Agustín Plencovich y la otra bala hirió en el antebrazo derecho a Luis Ferrari.
El muchacho malherido ascendió a la camioneta Renault Alaskan, la puso en marcha y solo pudo hacer unos metros en reversa hasta desvanecerse fatalmente. El vehículo impactó con su parte trasera contra unos fardos de pasto y concluyó su trayectoria con el conductor presuntamente fallecido.
Mientras tanto Ferrari intentó huir a campo traviesa y realizó varios llamados a familiares, allegados y amigos para pedir auxilio.
Sánchez lo siguió a Ferrari montado a un caballo y lo obligó, intimidando con otra escopeta (calibre 16) a regresar hacia la pick up donde había quedado Plencovich.
A Luis Ferrari le disparó en el rostro para provocarle la muerte en forma instantánea y ascenderlo al interior del habitáculo.
Aparentemente habría intentado desarrollar una maniobra de trasladar los cuerpos a un lugar alejado para dejar impune el doble crimen.
Así fue como pasó el cuerpo sin vida del joven al asiento trasero para alterar significativamente la escena de los asesinatos.
Al no poder trasladar los cadáveres en el vehículo: llamó a la Policía del Destacamento de Seguridad Vial El Socorro para entregarse.
A los primeros uniformados que arribaron les dijo, en forma espontánea, que mató a dos sujetos que lo vinieron a “apretar”.
Los integrantes de las fuerzas de seguridad que concurrieron encontraron a Ferrari sin vida sobre el asiento delantero derecho (acompañante) y a Plencovich, también fallecido, sobre el asiento trasero.
Los efectivos policiales secuestraron varias armas de fuego en el predio rural; entre ellas estaban las que dispararon los proyectiles que provocaron las muertes de las víctimas.
Las pericias balísticas y la operación de autopsia de los dos hombres asesinados acreditaron que a Plencovich lo mataron de un disparo con un arma de fuego calibre 14 y a Ferrari con un proyectil de 16 milímetros.
En las manos de Gabriel “El Sátiro” Sánchez encontraron rastros de pólvora como evidencia que efectuó los disparos.
Si en el juicio oral la fiscalía logra acreditar la acusación por los delitos de Homicidio agravado por el uso de arma de fuego, por Alevosía y Criminis Causa y Tenencia ilegal de armas de fuego de uso civil el Tribunal Oral en lo Criminal N° 1 de Pergamino podría condenar a Sánchez a prisión perpetua.
Por Alfonso Godoy para Real365
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