La modalidad de Educación Primaria de Adultos y Jóvenes está cumpliendo cincuenta años de vigencia en la provincia de Buenos Aires brindando la posibilidad de completar la Escuela a personas que por distintos motivos han dejado la escolarización formal.
Nunca es tarde para hacer aquello que han dejado postergado y es posible hacerlo en un marco de contención y compañerismo.
Es una experiencia educativa y social que permite alcanzar la plenitud a las personas que transitan las aulas en un marco de motivación y respeto.
Cada alumno es una experiencia de vida que emociona por esa materia pendiente que les queda desarrollar para sentirse en plenitud.
Juan Carlos Antonello, es alumnos de la Escuela de Adultos (CEA) 704 de la sede que funciona en la localidad de Pinzón, tiene 65 años.
Recientemente se ha jubilado y ha retomado la educación formal como una deuda pendiente en su vida.
La Escuela la tenido que postergar porque en la localidad chaqueña donde residía era muy lejos de la Escuela.
Pese a las distancias ha podido concurrir en varias oportunidades pero no ha logrado completar ni un año de trayectoria escolar por la necesidad de salir a trabajar para ayudar al sustento familiar.
Desde que era niño ha trabajado como peón rural en tareas de labranzas con cosecha de algodón y en campos forestales de Tucumán y Chaco.
De adolescente formó su familia y se afincó en una estancia de Tucumán donde trabajaba a destajo en agricultura y forestación.
Intervenían en bosques forestales para convertirlos en postes y también el desmonte para leña.
Siempre su fuerte era la temporada de cosecha de algodón en campos de Chaco, pero en la estancia tucumana habría logrado hacer una diferencia junto al hermano y trasladaron a la familia para estar juntos y proyectar un bienestar.
Dos años de intensos temporales dejaron sin posibilidades laborales en las fincas donde estaba afincado.
El dueño de la estancia prescindió de los servicios de Antonello al tener todos los campos anegados y perder la capacidad de producir en la estancia.
En ese entonces era joven y con ganas de trabajar donde haya una oportunidad. Por ese motivo vendió las pertenencias que tenía en la casa que habitaba y viajó a Resistencia para irse junto a la familia a Rosario en tren. En la terminal de colectivos de la ciudad santafesina preguntó a una persona a cual ciudad podría dirigirse con la expectativa de trabajar en tareas rurales.
Le recomendaron que tomara el colectivo rumbo a Pergamino y bajara en El Socorro o Manuel Ocampo.
Así fue lo que hizo: en El Socorro se dirigió con la familia a la plaza principal y buscó al Delegado del Pueblo.
En El Socorro trabajó con el encargado de la estancia Las Palmas, donde pudo aprender el trabajo rural de grandes extensiones con el manejo de tractores y maquinarias.
Ivana Piaggio es la Directora de la Escuela Primaria de Adultos (EEPA) 701 y los CEA nucleados 703, 704 y 707.
La docente Adriana González es la docente de la sede de Pinzón de la Escuela de Adultos donde concurren jóvenes y adultos mayores que concurren a completar el nivel Primario.
La escuela de educación primaria de adultos y los Centros de educación de adultos pertenecen a la modalidad de Educación de Jóvenes, Adultos y Adultos Mayores que este año cumple 50 años en la provincia de Buenos Aires. En todo este tiempo, muchísimas personas han accedido al título primario a través de la mencionada propuesta educativa, asumiendo el desafío de restituir y sostener el derecho a la inclusión de todas y todos los estudiantes al sistema educativo provincial. Se posiciona como garante de acceso permanente y egreso con saberes, desde propuesta alfabetizadoras y de continuidad pedagógica que además de producir aprendizajes crea lazos sociales significativos de reconocimiento, valoración y cuidado con impacto en la trayectoria de vida de adolescentes, jóvenes y adultos.
El próximo viernes 27 de octubre a las cuatro y media de la tarde en el parque España (Laprida y España) habrá un encuentro para celebrar los cincuenta años de la Escuela de Adultos.
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