Un animal quedó en medio de una balacera y murió por el odio y la enemistad entre sujetos que resolvieron las diferencias a los tiros.
Mataron un perro durante un tiroteo entre sujetos enfrentados en el barrio José Hernández en disputas que comenzaron en la tarde de fin de año y continuaron en la madrugada del día siguiente.
El fiscal Fernando Delío lleva adelante la instrucción judicial para esclarecer este grave episodio de enfrentamiento entre varios jóvenes que se dio en distintos lugares y diferentes momentos entre el martes 31 y el miércoles 1 de enero, aparentemente se confunden las víctimas y los victimarios porque hubo tanto agresiones de un lado como del otro en lo que sería una disputa juvenil y puede estar vinculada al mundo del hampa.
Lo cierto es que a partir de la detención o la prevención de uno de los sospechosos surgió que hubo tiroteos, que hubo enfrentamientos con armas de fuego, agresiones con armas blancas, personas apuñaladas como consecuencia de estos enfrentamientos en los que también murió un perro que quedó en el medio de una balacera de los tiroteos entre los zampones que se enfrentaron. Tan como surge la primera denuncia el martes 31 a las 12 del mediodía un sujeto se presentó en el domicilio de calle Colodrero al 1.600 donde reside una familia y con una cuchilla tipo carnicero atada a un palo y encintada con cinta de color azul amenazó de muerte a uno de los integrantes del grupo familiar para luego propinarle un corte en el antebrazo izquierdo con el arma blanca con esta cuchilla tipo de fabricación casera tipo tumbera ocasionándole lesiones de carácter leve. Más tarde ese mismo martes alrededor de las 16:20 nuevamente este ampón confronta con los miembros e integrantes de este grupo familiar y amenazó con un revólver calibre 22 que cuando fue aprendido tenía en su poder lo aprendió la policía y le secuestró este revólver calibre 22.
Para el fiscal Fernando Delío este episodio está calificado como amenazas agravadas lesiones leves y tenencia ilegal de arma de fuego por lo que fue indagado y en la audiencia este sujeto declaró amplió los episodios donde lo mostraban como victimario él se manifestó ser víctima manifestó haber sufrido agresiones y confesó que hubo un tiroteo un intercambio de disparos y como consecuencia de este enfrentamiento de los dos grupos antagónicos un perro resultó muerto herido letalmente con una de las balas que se dispararon.
La versión del sujeto que aparecía como el agresor resultó poder resultar la víctima.
Des este relato, surge para la Fiscalía que a él también lo apuñalaron en el brazo mientras se encontraba en la casa de Roldán y Mazzei.
El joven citó las personas que presenciaron lo ocurrido para que el fiscal los tome como testigos.
Estos testimonios podrían ser mayores evidencias que se incorporarían como prueba y ampliarían la cantidad de imputados.
La calificación penal podría llevar otra denominación y girar a la figura de lesiones recíprocas o a cada uno de los involucrados imputarles los delitos de acuerdo a cada uno de los hechos.
La Fiscalía 7 está ordenando cronológicamente y geolocalizado cada uno de los sucesos para atribuir las acusaciones penales a cada uno de los implicados de acuerdo a lo ocurrido.
Fueron enfrentamientos donde hubo agresiones recíprocas e intercambio de disparos en al menos un tiroteo y requiere deslindar las responsabilidades que debe imputar la Fiscalía.
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