Por Alfonso Godoy
La profesional recibió una llamada telefónica engañosa en la que le informaron que se había realizado una compra de electrodomésticos a su nombre y que, si no la había realizado, debía anularla de inmediato.
Sin saber que era una trampa, siguió las instrucciones proporcionadas por el estafador y accedió a su cuenta bancaria de forma remota.
Los hechos ocurrieron el martes la mañana, cuando la profesional se encontraba en el comercio Avenida de Mayo al 1.100.
La víctima recibió una llamada telefónica proveniente del número de abonado 01153256701, que aparentemente pertenecía a Mercado Libre.
Un individuo, que se identificó como representante de la empresa, le informó sobre una supuesta compra de un televisor y otros electrodomésticos a su nombre.
Para cancelar la compra falsa, la estafadora le indicó a la víctima que descargara una aplicación llamada “QUICKUPPORT” y que ingresara su TOKEN de cuenta. La farmacéutica, confiando en la supuesta veracidad de la llamada, siguió las indicaciones proporcionadas y, tras varios minutos, se dio cuenta de que su cuenta bancaria había sido víctima de un faltante de 1.400.000 pesos argentinos.
Desesperada y buscando soluciones, la profesional acudió al Colegio de Farmacéuticos y un joven de 30 años, quien trabaja como empleado de la entidad, le brindó acceso a su cuenta sin darse cuenta de que también estaba siendo engañada.
El empleado del Colegio ofreció su ayuda de manera solidaria, sin sospechar que se trataba de una estafa de gran envergadura.
El muchacho le ofreció un número de cuenta para recibir el supuesto reembolso por la compra fraudulenta.
Sin dudarlo, el solidario trabajador estableció una comunicación telefónica con el número de la farmacéutica, y siguiendo las instrucciones del estafador, accedió a una aplicación llamada “QUICKUPPORT” para obtener el reembolso.
Al igual que la primera víctima, el empleado constató el faltante de más de 150 mil pesos en su cuenta de Mercado Pago.
Estos casos de defraudación informática han encendido las alarmas en las autoridades locales, que están alertando a la población sobre este tipo de estafas telefónicas. Las víctimas son contactadas por personas que se hacen pasar por representantes de empresas reconocidas y, mediante engaños, logran obtener acceso a las cuentas bancarias de los afectados. Se recomienda a la comunidad mantenerse alerta y no brindar información personal o acceder a solicitudes sospechosas a través de llamadas telefónicas.
La Subcomisario Marcela Masciotta ha tomado el caso y ha iniciado las investigaciones correspondientes bajo las carátulas de defraudación informática, con los números de IPP 12-00-005259-23 y IPP 12-00-005261-23 respectivamente, en la UFI y Juzgado de Instrucción Nº 3 de Pergamino.
Las autoridades instan a las personas a denunciar cualquier incidente similar y a tomar precauciones adicionales para proteger sus datos personales y financieros en línea. Es fundamental recordar que las empresas legítimas nunca solicitarán información sensible o claves de acceso a través de llamadas telefónicas.
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