Por Alfonso Godoy para Real365
El joven comerciante está al frente de dos fábricas de portones de acero y brinda trabajo a más de quince personas en nuestra ciudad.
Las denuncias, que considera falsas e infundadas, lo afectan en su buen nombre y reputación y las atribuye a una finalidad electoral en tiempos electorales.
Para el empresario metalúrgico Antonella Menem está instalando como estafa las defraudaciones que ella misma habría cometido contra personas que le han dado una mano.
Para el pergaminense se trata de una denunciadora serial que vive de la polémica, la confrontación y de denunciar a quienes siempre la han apoyado como su tía (Zulemita) y su abuelo (el ex presidente).
Jorge Perchante, el papá de Nicolás, reside en la localidad serrana de Villa Parque Siquiman; cerca de Carlos Paz donde tiene una participación muy activa en la comunidad.
Por ese motivo lo atribuye a una cuestión política ya que “siempre que mi papá se postula a cargos electivos durante la campaña aparece esta mujer a realizar falsas denuncias”; aseguró.
En relación a la supuesta estafa a la que se refiere la nieta del ex presidente: “Es verdad que le compré un automóvil Volkswagen Vento que se lo pagué en efectivo y se firmó un boleto de compra venta y luego se hizo la transferencia. Ella se desprendió del vehículo porque tenía un nivel de vida que no lo podía sostener económicamente. Nosotros éramos amigos, le habíamos abierto la puerta de nuestra casa familiar y hemos compartido celebraciones de fiestas navideñas y de fin de año. En su momento le hemos prestado dinero para que nos devolviera cuando pudiese sin hacerlo ni nosotros reclamarlo. Ella debe responder por todas las cuentas que le han quedado sin saldar en distintos comercios de la localidad de Siquiman. En ese tiempo al tenerle mucha estima le prestamos un Volkswagen Bora para que pudiera moverse para trasladarse con los hijos. Antonella nos iba a comprar el Bora cuando vendiera la casa. Esa operación inmobiliaria la realizó. Le pagaron con dos vehículos. Por ese motivo, fui a pedirle que me restituyera el automóvil ya que no era de una necesidad primordial; al punto que quien lo estaba utilizando era una pareja de ella. Le reclamé que me lo pagara o me lo devolviera. Existía un gran riesgo porque el vehículo estaba a nombre de la madre de mis hijos y lo estaba utilizando gente que yo no conocía. Terminó en que fui a buscar la unidad sin que ella me devolviera el dinero. Ahí empezó la mala relación con nosotros. Además, ella no ha logrado hacer un buen negocio con la venta de una casa y responsabiliza a terceras personas por malas decisiones propias”.
Nicolás lamenta que involucre al padre y a las personas que han sido sus amigos y repentinamente han pasado a ser grandes enemigos. “Me decepciona que los medios se hayan eco de las denuncias seriales sin pruebas ni acreditar lo que está diciendo. No me dedico a comprar ni vender terrenos; como así tampoco la venta de automóviles. Es una mujer que habla mal de su propia familia. Para mi todo tiene una finalidad política desde el frente opositor de la localidad de Siquiman donde mi papá se postula. El episodio que denuncia ha pasado hace diez años y voy a apelar a la Justicia para que esta mujer deje de ensuciar mi buen nombre. Soy un emprendedor que le brinda trabajo a diecisiete personas y con el entusiasmo de concretar otros proyectos gastronómicos que involucrarán a más personas de pergamino con interés de crecer laboralmente”, concluyó.
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