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En un fallo dictado por el Juzgado Correccional 1 de Pergamino, el policía Facundo Dario Montiron fue condenado por abuso de autoridad en perjuicio de un chofer de remises.
La sentencia, dictaminada por el juez Alejandro Salguero, lo encontró penalmente responsable de los delitos de abuso de autoridad en concurso ideal con amenazas simples.
El veredicto impuso la pena de seis meses de prisión de cumplimiento en suspenso e inhabilitación especial por el mismo término para el ejercicio de un empleo o cargo público.
El incidente ocurrió el 20 de junio de 2021, alrededor de las cuatro y media de la madrugada cuando un móvil policial interceptó a un automóvil de la Agencia de Remises “Disque Ya”.
El vehículo policial estaba ocupado por el Sargento Sebastián Barrera, la Oficial Guadalupe Toro, y los Oficiales Walter Dalinger y el condenado, Facundo Montiron.
A pesar de que la identificación de los ocupantes resultó sin impedimentos legales, Montiron, de manera abusiva, continuó hostigando al conductor del remis.
El chofer, Víctor Carnevale, y un pasajero, Juan Saucedo, fueron obligados a bajarse del vehículo y sometidos a un registro indebido, que incluyó quitarles las zapatillas y medias. Montiron, ignorando las órdenes de retirada de sus colegas, amenazó al conductor con consecuencias graves si encontraba drogas en el automóvil.
El incidente culminó con Montiron advirtiendo a Carnevale que “se cuidara” porque lo “partiría al medio”.
Durante el juicio, la víctima, Víctor Carnevale, detalló cómo fue intimidado y amenazado por Montiron, quien incluso llegó a realizar un registro personal humillante. La Oficial Guadalupe Toro, testigo del hecho, confirmó la actitud abusiva de Montiron y su papel en el procedimiento.
El juez Salguero, en su fallo, expresó su certeza de que Montiron cometió el delito de abuso de autoridad al avanzar sobre los ocupantes del vehículo y exigirles desnudarse parcialmente, todo ello durante una madrugada de invierno. Condenó a Montiron a seis meses de prisión en suspenso e inhabilitación especial por el mismo período para el ejercicio de empleo o cargo público.
Salguero enfatizó que estas prácticas policiales deben ser desterradas y no toleradas. Señaló que aquellos encargados de velar por la seguridad ciudadana no deben convertirse en verdugos, abusando del poder que el Estado les ha otorgado para proteger a los ciudadanos. La sentencia busca enviar un claro mensaje de rechazo a este tipo de conductas y reafirmar el compromiso con la integridad y seguridad de la comunidad.